Crónicas del Extrarradio (VI): El Plan Bidagor y las anexiones.

Una vez desescombradas las calles tras los estragos de la guerra civil, se redacta la Ley de Bases para la Ordenación de Madrid, del 25 de noviembre de 1944, año en el que también se aprueba el Plan Bidagor, redactado en 1941 y que establece muchos elementos del Madrid actual.

Cruce de las calles Bravo Murillo y María Zayas. Esta zona, llamada Tetuán de las Victorias, era fronteriza de Madrid con Chamartín de la Rosa, y edificios de una o dos plantas, como este de la imagen, fueron a los que les pilló la anexión. Los que estaban hacia el sur eran de Madrid; Los que estaban hacia el norte eran de Chamartín. Desde entonces están todos en Madrid, y el sector de la calle Bravo Murillo (antigua salida de Madrid hacia la carretera de Burgos) comprendido entre Cuatro Caminos y la Plaza de Castilla es una de las localizaciones con más vida de la capital, con infinidad de bares y comercios de todos los tipos. Foto: Juan Pedro Esteve García, enero de 2016.
Fotografía nº 1

 

Este Plan toma su nombre de Pedro Bidagor, director de la Junta de Reconstrucción de Madrid, y jefe de la Sección de Urbanismo de la Dirección General de Arquitectura. La planificación del primer franquismo para la ciudad de Madrid tiene elementos propios, aunque también hereda algunos elementos de los diseños republicanos, siendo curioso que buena parte del equipo de Bidagor venía de la CNT anarquista.

Ampliación de detalle del Plano de Facundo Cañada de 1900 con los términos municipales de los pueblos que circundaban Madrid. 13 de ellos serían finalmente seleccionados para incorporarse al municipio de la capital a principios del régimen militar del general Franco, entre los años 1948 y 1954.
Fotografía nº 2

 

El Plan Bidagor establece un Madrid con unos Enlaces Ferroviarios casi idénticos a los definitivos (con el enlace exterior de mercancías entre Chamartín, Hortaleza y San Fernando de Henares), insiste en los Poblados Satélites de los proyectos anteriores (de los que se construirán finalmente algunos) y deja trazada una M-30 también casi idéntica a la finalizada en los años 70, por los cauces del Abroñigal y del Manzanares, aunque el recorrido exacto del cierre norte de este Tercer Cinturón seguirá en discusión mucho tiempo. Inicialmente iba a ser algo parecido al actual corredor de Sinesio Delgado, y se barajaban alternativas como la de pasar tan al sur como por Tetuán y la plaza de Cuzco. El crecimiento de la urbe hizo que la terminación de la M-30 fuera ya bordeando el Barrio del Pilar, y muy a finales del siglo XX.

Reinterpretación del plano por La Gatera de la Villa con texto más claro y los nombres de las poblaciones que integraron el nuevo término municipal. Ha tenido algunas correcciones menores en los límites con los ayuntamientos vecinos, pero en líneas generales, sigue siendo el Municipio de Madrid en el que vivimos en 2016.
Fotografía nº 3

 

Otras ideas del Plan Bidagor eran la desviación de la carretera de Toledo, para que en vez de ir por Antonio Leyva saliera de Madrid por la prolongación del Paseo de Santa María de la Cabeza, y la construcción de un “acceso representativo” que uniera el Palacio Real con el corredor de la N-VI. Por entonces es cuando otro Plan, el Plan Peña, da a las carreteras españolas las numeraciones por las que se las ha conocido hasta hace poco. La variante de Santa María de la Cabeza como primer tramo de la N-401, o carretera de Madrid a Toledo, se construirá años más tarde. No así el acceso al Palacio, pues la sede de la Jefatura del Estado había sido trasladada a El Pardo, uno de los pueblos a absorber.

En 1947 se aprobó la anexión a Madrid del término municipal de Chamartín de la Rosa, que se haría efectiva en 1948, y que iniciaría procesos equivalentes en otros doce pueblos madrileños, hasta que el último (Villaverde) pasó a formar parte de la capital de España en el año 1954. A los exiguos 68,42 kilómetros cuadrados que formaban el término municipal original de la Villa y Corte, que ya tenía 1.200.000 habitantes, se iban a sumar 538,67 kilómetros cuadrados y 330.000 habitantes para dar lugar a una urbe de 607,09 kilómetros cuadrados de extensión. (Basicamente, casi los mismos de la actualidad, solamente variados por algunas rectificaciones posteriores)

Sobre un plano actual publicado por el Ayuntamiento de Madrid (cuyo territorio aparece sombrado en gris) resaltamos con trazo rojo lo que era el Madrid previo a 1948, para que se vea claramente lo que supusieron las 13 anexiones, especialmente la de El Pardo, en el aumento de tamaño del municipio. Por el sur, límite con Getafe y Leganés, se divisan paisajes que son la avanzadilla de La Mancha, y por el norte, parajes de La Marmota en el límite norte de los montes de El Pardo, casi al lado de Colmenar Viejo, estamos ya a las puertas de la Cordillera Central.
Fotografía nº 4

 

La mayor parte de las anexiones se hicieron durante el mandato del alcalde José Moreno Torres, que estuvo también en la Dirección de Regiones Devastadas.

La ampliación de Madrid supuso incorporar al callejero 4324 calles, de las que hubo que cambiar el nombre de 912 para evitar duplicidades. Es de estos años cuando vienen costumbres como la de dar nombres de sierras a las calles de Vallecas o de dioses griegos a las de Canillejas.

El colofón final a las anexiones lo supuso la nueva división de distritos municipales de 1955.

(continuará)

Pies de las fotografías:

  • Fotografía nº 1: Cruce de las calles Bravo Murillo y María Zayas. Esta zona, llamada Tetuán de las Victorias, era fronteriza de Madrid con Chamartín de la Rosa, y edificios de una o dos plantas, como este de la imagen, fueron a los que les pilló la anexión. Los que estaban hacia el sur eran de Madrid; Los que estaban hacia el norte eran de Chamartín. Desde entonces están todos en Madrid, y el sector de la calle Bravo Murillo (antigua salida de Madrid hacia la carretera de Burgos) comprendido entre Cuatro Caminos y la Plaza de Castilla es una de las localizaciones con más vida de la capital, con infinidad de bares y comercios de todos los tipos. Foto: Juan Pedro Esteve García, enero de 2016.
  • Fotografía nº 2: Ampliación de detalle del Plano de Facundo Cañada de 1900 con los términos municipales de los pueblos que circundaban Madrid. 13 de ellos serían finalmente seleccionados para incorporarse al municipio de la capital a principios del régimen militar del general Franco, entre los años 1948 y 1954.
  • Fotografía nº 3: Reinterpretación del plano por La Gatera de la Villa con texto más claro y los nombres de las poblaciones que integraron el nuevo término municipal. Ha tenido algunas correcciones menores en los límites con los ayuntamientos vecinos, pero en líneas generales, sigue siendo el Municipio de Madrid en el que vivimos en 2016.
  • Fotografía nº 4: Sobre un plano actual publicado por el Ayuntamiento de Madrid (cuyo territorio aparece sombrado en gris) resaltamos con trazo rojo lo que era el Madrid previo a 1948, para que se vea claramente lo que supusieron las 13 anexiones, especialmente la de El Pardo, en el aumento de tamaño del municipio. Por el sur, límite con Getafe y Leganés, se divisan paisajes que son la avanzadilla de La Mancha, y por el norte, parajes de La Marmota en el límite norte de los montes de El Pardo, casi al lado de Colmenar Viejo, estamos ya a las puertas de la Cordillera Central.

 

Juan Pedro Esteve García
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