El Motín de Aranjuez, ocurrido entre el 17 y el 19 de marzo de 1808, es uno de esos episodios en la historia de España que marcan un antes y un después. Este levantamiento, que tuvo lugar en un contexto de crisis política y social durante el reinado de Carlos IV, no solo supuso un traspaso de la corona entre padre e hijo, sino que también marcó el inicio de una serie de acontecimientos que culminarían en la Guerra de Independencia Española.