Superada la barrera de los cincuenta números seguimos con la edición de un nuevo miembro de la familia, el 51. En este número paseamos por Santorcaz -donde visitamos la iglesia de San Torcuato-, hablamos de un elemento antaño común en el paisaje urbano y hoy prácticamente desaparecido -¿qué será..?-, recordamos la exposición sobre Filipinas que tuvo lugar en el Retiro allá por 1887 y nos vamos de compras a Sepu, porque quien calcula compra en Sepu. ¿Nos acompañáis? Y estos son sólo algunos de los artículos que podéis encontrar en este número.